Evita caer en errores frecuentes. Haz una dieta balanceada y nútrete con comida sana sin poner en riesgo tu salud.

La mayoría de hombres y mujeres del país afirman haber hecho dieta alguna vez en sus vidas, según un estudio de Datum Internacional y Red Win. En otras palabras, un buen número peruanos se pregunta cómo hacer dieta o está en la búsqueda de comida sana, pero la avalancha de información sobre el tema muchas veces evidencia una serie de mitos sobre las dietas.

Esta situación es más preocupante si haces deporte, pues tu cuerpo necesita una dieta balanceada para tener el rendimiento físico deseado. Por eso mismo, primero debes trazarte un objetivo. En la mayoría de las veces, la meta es reducir algunos kilos. Y ese ímpetu se entiende en un país donde 14 millones de personas mayores de 15 años tienen sobrepeso, según el Ministerio de Salud.

Por lo general, se cree que soportar “muchos sacrificios” es la vía más rápida para quemar esos kilos de más y llegar a tener un abdomen plano. Si estás a punto de iniciar una dieta o ya estás inmerso en ella, mejor verifica que cada una de las indicaciones sean las correctas. Hay mitos que debes desmentir, de acuerdo con información de instituciones como el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos y la Biblioteca Nacional de Medicina del mismo país.

Mito 1: Menos carbohidratos, mejor peso

Verdad a medias. Hay dos tipos de carbohidratos: los simples, presentes en alimentos como galletas o caramelos, que son los menos recomendables; y los complejos, como los panes, las legumbres y algunas frutas, cuyo aporte de vitaminas, minerales y fibras son ideales para tu organismo, más aún durante la actividad física.

Mito 2: Omitir una comida ayuda a bajar de peso

Falso. De acuerdo con la nutricionista Lorena Romero, comer poco o llegar al extremo de suprimir una de las comidas del día genera que el metabolismo sea lento. ¿Qué significa esto? Simple: al hacer cualquier actividad física, el cuerpo quemará pocas calorías y acumulará más grasa de lo normal. Además, hasta el momento no existe ningún estudio médico que certifique que ayunar sea positivo en una dieta para bajar de peso.

Mito 3: Comer de noche engorda

Verdad a medias. Aunque no existen estudios que demuestren esta afirmación, el Departamento de Salud de los Estados Unidos menciona que quienes “comen tarde en la noche tienden a elegir refrigerios altos en calorías”. Además, por este mal hábito, las personas no duermen bien. Recuerda que la digestión demora entre dos y tres horas después de la cena. Es decir, pasado ese tiempo, recién se recomienda descansar.

Mito 4: La dieta no se altera si como productos light o bajos en grasas

Falso. Los productos light muchas veces tienen hasta más calorías que su versión original. El Departamento de Salud de Estados Unidos explica que esto ocurre porque llevan ingredientes como harina, sal, almidón o azúcar para mantener su sabor y textura. Lo que recomienda la institución es leer las etiquetas de nutrición y escoger el mejor producto, a fin de evitar una ingesta que pueda ser contraproducente para el organismo.

Mito 5: Si evito la comida rápida ya estoy haciendo dieta

No necesariamente. Una alimentación saludable no se basa solo en omitir los fast food. Una dieta para bajar de peso, por ejemplo, incluye una serie de alternativas para cumplir el objetivo, como incluir frutas y refrescos bajos en azúcar. Pero si por circunstancias inevitables llegas a un restaurante de comida chatarra, busca la opción más saludable de la carta. O, en todo caso, date un “gustito”: hay investigaciones que evidencian que escoger un día para comer tus platos favoritos puede ser positivo para tu organismo.

Entonces, ¿qué debo comer si hago deporte?

Si haces actividad física moderada de forma constante o te interesa iniciar un estilo de vida deportivo, no pierdas de vista uno de los puntos más importantes: la alimentación. Antes, durante y después del esfuerzo físico tu cuerpo necesita de vitaminas y minerales que lo ayuden a ganar energía y evitar posibles lesiones.

En principio, determina a qué hora practicarás algún deporte. Para Estefanía Ramo, nutricionista del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), el mejor momento del día para ejercitarse es la mañana. Sin embargo, en el caso que la rutina sea nocturna, esta debe ejecutarse dos horas y media antes de dormir. Así, no alterarás el llamado reloj biológico.

A primeras horas del día, es bueno tomar un desayuno ligero, compuesto por algunos carbohidratos como plátanos o yogures que servirán como fuente de energía. Rubén Bravo, vocero del IMEO, aconseja esperar media hora para luego hacer el trabajo físico y, posteriormente, volver a comer sano.

Durante el deporte, lo más importante es mantenerse hidratado. Nancy Cohen, profesora del departamento de nutrición de la Universidad de Massachusetts, afirma que “jugos, bebidas deportivas, barras energéticas y comidas con alto contenido en carbohidratos pueden ser útiles”.

Finalmente, después del ejercicio la dieta balanceada debe incluir proteínas, acompañadas de carbohidratos en una cantidad moderada. Así recuperarás la energía consumida por las rutinas de alto rendimiento. En esa línea, tomar PRO también contribuye a reponer la energía y evitar lesiones a nivel muscular. Ya sabes: antes de iniciar una dieta, lo mejor es informarse a través de fuentes confiables o acudir a un nutricionista. Come sano y #AlcanzarTuNivelPRO.